En nacimiento de Chavez

En plena oscuridad se encontraba Chavez, todo fornido cerca de mi cuello. Me besaba cada noche, mientras dormía llena de frío; hasta que un día lo hallé jugando entre mis sábanas, con mi cuerpo. Recuerdo esa mañana en la que desperté y sentí su presencia en casi toda mi garganta. Un tumor dijeron los doctores.  

A buen entendedor pocas palabras


Contraluz